¿Por qué aceptamos ser vigilados?

En este vídeo exploro las razones de fondo por las que aceptamos algo tan perjudicial para nosotros como la vigilancia a la que estamos sometidos en nuestras vidas digitales (y más allá, tomando en cuenta que lo digital penetra en todos los rincones de nuestras existencias).

Tal y como explico en el vídeo, antes de analizar por qué consentimos esta vigilancia y extracción de datos personales, lo primero es constatar que la mayoría de los ciudadanos no son conscientes de la intensidad de esta vigilancia, y aún menos del coste que supone para ellos y para la sociedad.

Sin embargo, el objetivo que propongo aquí es poner la lupa en las razones por las que también se trata de una dinámica transaccional, en la que –hasta cierto punto, de forma desequilibrada y sin ser consciente de las implicaciones que tiene– damos nuestro acuerdo a ser vigilados, a cambio de 4 ventajas que desarrollo más en detalle en el vídeo:

  1. Facilidad

  2. Salud

  3. Seguridad

  4. Control de los demás

Si estáis interesados en profundizar en esta cuestión, os recomiendo el capítulo 4 de mi libro Anestesiados: CONTROLADOS (en la primera edición se llamaba VIGILADOS).

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